Charles
Chaplin es uno de los directores más importantes de la historia del
cine. En su autobiografía
recuerda,
entre otros acontecimientos, su difíciles comienzos como actor.
La
primera vez que fue a la oficina, estaba llena de actores de ambos
sexos. Se quedó en la puerta nervioso. Con gran timidez, trató de
esconder su traje viejo y sus zapatos un poco gastados. Cada minuto
que pasaba, la oficina se vaciaba y en una ocasión, Charles Chaplin se quedó solo.
El
empleado le llevó a la oficina de al lado donde anotó su nombre y
dirección. Un mes después, le llegó una nota para que se
presentara en la agencia Blackmore. Charles Chaplin se puso su traje nuevo y le
llevaron ante el señor Blackmore que le dio una nota para que la
llevara a las oficinas del señor Hamilton.
Tenía
que interpretar el papel de Billie, el botones en la obra de Sherlock
Holmes. El señor Hamilton mlee dijo a Charles Chaplin que había un papel de muchacho en
otra obra nueva, cobraba 2 libras y 10 chelines, como en la obra de
Sherlock Holmes.
El
señor Hamilton llamó a todo el personal de la oficina para que
viera a Charles Chaplin y le dijo que iba a ser el papel de Billie. Todos estaban muy
satisfechos. El señor Hamilton le dio una nota para el señor
Saintsbury y me fui. Pasó lo mismo con el señor Saintsbury, llamó
a sus socios de teatro para que le conocieran. Le dio un papel para
que se lo aprendiera en su casa y de pronto empezo a pensar que dejó
atrás una vida de probeza y ahora iba a ser actor ¡Era su sueño!
Opinión.
Esta historia ha estado muy bien, porque trata de que Charles Chaplin
de pequeño quería ser actor y lo consiguió. Yo recomiendo de que
tod@s os leáis esta historia.
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